Practicar una actividad física durante la infancia ayuda a los niños a crecer fuertes y sanos y a tener más confianza y seguridad en sí mismos.
Los niños necesitan hacer ejercicio al menos una hora todos los días. Cualquier actividad física es válida: saltar, jugar, correr o practicar algún deporte de forma constante.
Y es que son muchos los beneficios que los niños pueden obtener del ejercicio practicado desde su infancia:
- Cuando los niños hacen deporte, se divierten, se socializan y descargan las tensiones, además de realizar nuevos descubrimientos.
- El ejercicio ayuda a eliminar el exceso de calorías. La masa adiposa que se forma en los primeros años de vida es la más fácil de eliminar. Por esta razón, los niños que hacen más ejercicio durante la infancia tienen menos posibilidades de tener problemas de obesidad cuando sean adultos.
- El deporte regula el ritmo sueño-vigilia del niño, porque estimula la producción de algunas hormonas, como la serotonina, que predisponen a un sueño de calidad. Asimismo, la función intestinal y el apetito del pequeño mejoran notablemente.
- Llevar a cabo una actividad física al aire libre ayuda al organismo del pequeño a reforzar las defensas inmunitarias y a que sea me nos vulnerable a los ataques de los virus.
- El ejercicio físico influye de forma positiva en la postura y en la personalidad del niño, porque el pequeño se siente más seguro de sí mismo.
- Practicar ejercicio refuerza el tono muscular del niño, lo que repercute a una mayor resistencia y agilidad.
- La actividad física protege de las enfermedades cardiovasculares, porque previene la arterioesclerosis, la hipertensión y la diabetes, según informan estudios recientes.
Bibliografía extraída de: http://www.mibebeyyo.com/ninos/salud-del-nino/ejercicio-ninos-beneficios-5881
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